La ultima edición del Informe de la UNESCO sobre la educación para todos pone en duda las probabilidades de alcanzar la meta que tiene por objeto la educación para todos, (EPT) en el horizonte 2015. Alternando un moderado optimismo y un realismo con tintes de pesimismo, el informe propone un texto de medias tintas, el cual ilustra perfectamente y a escala mundial, la geometría variable de la realización del derecho a la educación.
Recordemos que en el curso de los últimos 12 años, la ONU a proclamado 12 decenios y una Declaración del Milenio. Estas proclamaciones hacen parte de ambiciosos objetivos cristalizados en torno al deseo de un mundo mejor. Cuando estos objetivos no se alcanzan por supuesto se deben reeditar. Es el caso bien real de la postergación obligada del objetivo de la educación para todos formulado en Jomtien, Tailandia, en 1990. Diez años mas tarde, el Foro de Dakar, que tuvo lugar en Senegal, no tuvo otra opción que la de diferir la meta a 2015. En relación con esto, el ultimo informe de la UNESCO así como los que lo precedieron, evalúa en que medida los compromisos de los estados miembros se cumplen in situ.
Según la UNESCO, existiría un “efecto Dakar” que probaría que el hecho de ”reunirse en torno a objetivos comunes puede movilizar los países a favor de la autonomización de los individuos”. El Informe cita como pruebas la suspensión de los aranceles de estudio en ciertos lugares, la ayuda a las familias de bajos ingresos, los estímulos para escolarizar las niñas, y la construcción de indicadores que permitan medir los logros escolares.
Sin embargo el mismo Informe hace hincapié en que el índice de desarrollo de la educación para todos (IDE), calculado para 129 países, muestra que 25 de entre ellos están lejos de realizar la EPT. Además el Informe agrega que de los 86 países que no han realizado aun la enseñanza primaria universal, 58 no lo harán hasta entrado el 2015.
En cuanto a las niñas, ellas continúan teniendo menos acceso a la educación que los niños en varios países de África, en los países árabes, y en el Sudeste asiático. Y la calidad de la enseñanza estaría lejos de ser la mejor. Este es entonces un balance lleno de contrastes, que relativiza la noción de progreso en la educación incluso en los países ricos, en los cuales la deserción y el fracaso escolar son el pan de cada día de una parte importante de los alumnos.
El acceso a la educación para todos requiere una repartición de la riqueza y terminar con los conflictos armados, necesidades que no figuran en la orden del día en las cumbres de los Estados poderosos para los cuales diplomacia y comercio de armas siguen siendo un todo sin contradicciones. Estas son políticas que llevan a la destrucción ante las cuales la UNESCO es completamente impotente.
Referencia :
UNESCO (2008). « ¿La educación para todos en 2015, meta accesible?’
http://portal.unesco.org/education/fr/ev.php-
URL_ID=49591&URL_DO=DO_TOPIC&URL_SECTION=201.html
Ilustración "Précipice" par Quat'rues